Preguntamos para investigar, indagar sobre los
asuntos que nos interesan. En tiempos antiguos, entre los griegos, apareció la
palabra kontos que significaba vara, palo o lanza (posteriormente contus en
latín). Para indagar la profundidad de las lagunas, introducían una vara o
kontos, y llamaron este método percontare, que significa indagar por medio de
una vara. Con el paso del tiempo, la palabra evolucionó a preguntar y significó
solo indagar.
Otra palabra que tiene en su
origen una lanza es el vocablo subasta: sub= debajo y hasta= lanza, asta. Los
inmuebles propiedades del Estado y los tesoros tomados como botines de guerra
eran marcados con una lanza. En algún momento se tenía que vender lo que estaba
marcado por la lanza (sub hasta vendere). Con el tiempo subastar significó sólo
vender; cualquiera podía subastar. Al principio, se enterraba una lanza en el piso y en la
parte inferior se acomodaban las mercancias para vender. Después la lanza se olvidó.